La selección masculina Sub-21 de Inglaterra se coronó campeona de Europa por segundo año consecutivo tras imponerse 3-2 a Alemania en una final que se decidió en la prórroga. El encuentro tuvo lugar en el estadio Tehelné pole de Bratislava.
Un inicio prometedor para Inglaterra
Los ingleses parecían encaminarse hacia un triunfo cómodo gracias a los goles tempraneros de Harvey Elliott y Omari Hutchinson, ambos anotados antes del minuto 25. Sin embargo, Alemania reaccionó antes del descanso con un tanto de Nelson Weiper que recortaba distancias.
Reacción alemana y empate en el marcador
En la segunda mitad, Paul Nebel logró igualar el marcador al minuto 60, poniendo el 2-2 y dando nuevas esperanzas al conjunto germano. Este momento de conexión con el juego les permitió dominar ciertas fases del encuentro, poniendo en aprietos a Inglaterra.
La experiencia y los cambios, clave para Inglaterra
A pesar de la presión alemana, Inglaterra redobló esfuerzos para mantener vivas sus opciones en la final. Los movimientos tácticos realizados por el entrenador Lee Carsley surtieron efecto, especialmente al inicio de la prórroga, cuando Jonathan Rowe anotó de cabeza el gol decisivo que otorgó a Inglaterra su cuarto título europeo Sub-21.
Un título histórico para Inglaterra
Con esta victoria, los ‘Tres Leones’ igualan el doblete logrado en 1982 y 1984, conquistando así dos campeonatos consecutivos en la categoría. Entre el público se encontraba Thomas Tuchel, seleccionador absoluto, quien observaba atentamente para encontrar claves de cara al próximo Mundial.
